Vistas a la página

domingo, 29 de junio de 2014

EL POEMA DE DIOS





No hay nada más satisfactorio que poder plasmar nuestros pensamientos por medio del lenguaje escrito y así de manera sistemática y ordenada perpetuar nuestras ideas. La delicada caricia de una carta hecha a la distancia nos convierte en seres valientes capaces de expresar lo que nunca diríamos de viva voz, la impactante historia de una novela nos transporta a un mundo imaginario e irreal pero hecho posible por medio de las letras, ¿quien alguna vez no intentó describir un sentimiento, la percepción de su entorno o el deseo de su corazón por medio de un poema? El mismo Dios lo hizo, la biblia nos muestra en Romanos 1:20 que él se manifiesta por medio de las cosas HECHAS, y este término cuyo vocablo original del griego es “poiema” es la misma raíz de la palabra poema, la cual en el contexto del pasaje refiere que la creación es una manifestación poética del supremo hacedor. En tal sentido si la poesía como forma literaria muestra la genialidad de sus autores, el universo no puede ser más elocuente para describir la potente gloria de su creador, con toda razón el Rey David declara categóricamente en el salmo 19:1 “Los cielos cuentan la gloria de Dios, Y el firmamento anuncia la obra de sus manos”.

Pero allí no acaba todo, las escrituras enseñan en efesios 2:10 que hay una segunda poesía divina, este pasaje utiliza esta misma expresión “porque somos HECHURA suya…” en esta oportunidad para referirse a los cristianos, lo cual enfatiza en que ellos son el diseño y la manufactura del artesano divino, “creados en Cristo Jesús para buenas obras”, a los cuales le llama además su nueva creación. Gálatas 6:15. 2 corintios 5:17 complementa este concepto, evidenciando el acto creativo más grandioso realizado por Dios, EL NUEVO NACIMIENTO, un maravilloso milagro mencionado ampliamente en las escrituras aunque llamado de diferentes formas, en Tito 3:15 dice Pablo que el todo poderoso nos salvo por el lavamiento de la REGENERACIÓN (gr. Palingenesía: Renacimiento) este término ilustra el hecho por el cual el hombre caído es Re-creado internamente a una condición que le permite tener comunión con Dios y por lo tanto entender sus pensamientos; 1 Pedro 1:3 menciona el término RENACER (gr. Anagennáo: Engendrar) esto incluye además el concepto de que aquellos renacidos son engendrados por Dios suceso que les otorga el derecho de ser sus hijos (Juan 1:12), por tanto la simiente del Padre permanece en ellos (1 Juan 3:9), llegando así a ser participantes de la naturaleza Divina (2 Pedro 1:4), creados según Dios en la justicia y santidad de la verdad (Efesios 4:24). De igual manera la expresión nueva CRIATURA del griego “Ktisis” utilizada en 2 Corintios 5:17 se traduce también como origen, cosa creada, institución y creación, incluye además la idea de que todo lo anterior es el resultado de la obra exclusiva de Dios.

La idea de la palabra “POIEMA” (hechura o cosa creada) por un lado expresa la excelencia hecha por Dios en el universo como manifestación de su obra exterior, pero también muestra nuestra vida en Cristo es como una poesía que expresa la forma y el patrón de la belleza agradable a Dios, pero tanto uno como el otro derivan su existencia y excelencia de su majestuoso poder. Como nuevas criaturas debemos recordar que fuimos creados para la gloria de su nombre, creados para buenas obras y de esta manera obedecer al mandato de nuestro señor Jesucristo cuando dijo “Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.” Mateo 5:16

El que tiene oídos para oír, oiga.